Sandra, millón de gracias, de todo corazón.
He aprendido muchas cosas contigo y, nunca sabrás lo acertado del momento!!
Reconocer y dar nombre a mis emociones... sí, lo digo mucho, pero es cierto. En momentos revueltos el poder reconocer la tristeza, la alegría, la esperanza y la desesperanza, la compasión y la rabia, el desconsuelo o el coraje, abre nuevos caminos para encauzar tu vida hacia el equilibrio y la paz, mediante la autoconciencia y el autocontrol.
Honrar tus valores y reconocer los de los demás.
Luchar contra las creencias limitantes. Creer en las potenciadoras.
Persistir y persistir.
Y, como dices, " Con motivación no hace falta ni fuerza de voluntad" frase que me ha hecho pensar mucho...
Y qué importante es la empatía y qué bonito hacer feliz al otro.
:)
Gracias por tu reconocimiento!!
:)
Gracias por tu reconocimiento!!
Para Sandra García
Sin palabras...
ResponderEliminarCamino, gracias a tí, a tus aportaciones, a tus reflexiones.
Gracias por compartir en tu blog las distintas entradas, tan cuidadosamente elegidas.
Y GRACIAS especialmente por esta, con la que estás llevando a la práctica tu objetivo manifestado durante el curso de (me permito compartirlo con tus seguidores) "Estoy cogiendo una nueva costumbre que me hace muy feliz: agradecer y decirle a mis amigos las buenas cualidades que veo en ellos"
Sigue así, querida Camino.
Un abrazo muy muy fuerte.
Sandra García
Un abrazo, Sandra!
ResponderEliminar:)