Nos puede ayudar a disminuir esta emoción y la percepción de amenaza, el evaluar las circunstancias de forma objetiva y fortalecer nuestra autoestima, así como potenciar la creatividad y la compasión.
Y, sin duda, funciona muy bien lo de pedir ayuda!! Porque cuando las emociones se te apoderan, qué difícil es ser objetivo y mejorar tu autoestima tu solito!!
No hemos de olvidar que vivimos en un país privilegiado y recursos hay muchos (yo soy uno, por cierto). Médicos, psicólogos, coaches... y si tienes algún amigo que sepa escuchar y no tenga prisa por resolverte los problemas dando magníficas ideas que a ti no te sirven, llámale y explícale! Quizás ese sea el principio del camino, porque al explicarle a tu amigo-ángel tus circunstancias seguro que ya ves las cosas de otra manera y alivias un poco la tensión. No tengas miedo a mostrarte vulnerable, eres humano y todos hemos pasado por ahí.
Y mientras no te decides, he encontrado esta joya en la web del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
A por ello!! Un abrazo!!
1. Autoevaluación del estrés. Test de ansiedad.
2. ENTRENAMIENTO basado en la mejora de las HABILIDADES PERSONALES